Economía azul

La economía azul es un concepto que propone una forma de producción y consumo basada en la imitación de los ecosistemas naturales, aprovechando los recursos disponibles de forma eficiente y sostenible, y generando valor añadido y bienestar social. Se inspira en la naturaleza para crear soluciones innovadoras que respeten el medio ambiente y reduzcan los residuos y las emisiones.

La economía azul también se refiere a la importancia de los mares y los océanos como motores de la economía, por su gran potencial para la innovación y el crecimiento en sectores como la pesca, la acuicultura, el turismo, el transporte marítimo, la biotecnología o las energías renovables. La economía azul busca aprovechar los recursos marinos de forma responsable y sostenible, garantizando su conservación y su biodiversidad.

Es un modelo que busca un desarrollo económico más equilibrado, inclusivo y respetuoso con el planeta que contribuya, además, a los objetivos de la Agenda 2030 y el Acuerdo de París sobre el cambio climático. En resumen, una oportunidad para crear empleo, riqueza y bienestar, al mismo tiempo que se protege el medio ambiente y se fomenta la cooperación entre los diferentes actores sociales.

Imagen microscópica sobre Blue Economy en Principios Verdes.

Foto de Michael Schiffer en Unsplash

 

Crecimiento azul. MITECO

El crecimiento azul es una estrategia de la Unión Europea que busca apoyar el desarrollo sostenible de los sectores marino y marítimo, aprovechando el potencial de los mares y los océanos para la innovación y el crecimiento económico. Se basa en el reconocimiento de que los recursos marinos son limitados y deben ser utilizados de forma responsable y eficiente, garantizando su conservación y su biodiversidad.

Abarca diferentes ámbitos de actividad, como la pesca, la acuicultura, el turismo costero, el transporte marítimo, la biotecnología azul, las energías renovables marinas, la minería submarina o la vigilancia marítima. Busca impulsar la competitividad, la creación de empleo y el valor añadido de estos sectores, al mismo tiempo que se fomenta la investigación, la innovación, la cooperación y la gobernanza marítima. Así como también busca para reforzar la resiliencia y la recuperación de la economía europea tras la crisis provocada por la pandemia de COVID-19.

Necesita, claramente, la participación y el compromiso de todos los actores implicados, desde las instituciones y las empresas hasta los ciudadanos y las organizaciones no gubernamentales.

¿Cómo se relaciona la economía azul en la protección de los océanos?

Sin duda el concepto ha ido abarcando todo lo relativo a la protección de los océanos y a día de hoy trata de implementarse en todo tipo de proyectos de conservación.

ODS 14

Conservar y utilizar en forma sostenible los océanos, los mares y los recursos marinos para el desarrollo sostenible.

El Objetivo 14 tiene metas que deben alcanzarse para 2030, cuyas primeras siete son metas de resultados, —según información consultada en la wikipedia:

  • Reducir la contaminación marina;
  • Proteger y restaurar ecosistemas;
  • Reducir la acidificación de los océanos;
  • Pesca sostenible;
  • Conservar las áreas costeras y marinas;
  • Poner fin a las subvenciones que contribuyen a la sobrepesca;
  • Aumentar los beneficios económicos del uso sostenible de los recursos marinos.

Mientras que las tres últimas metas son medios para lograr metas:

  • Aumentar el conocimiento científico, la investigación y la tecnología para la salud de los océanos;
  • Apoyar a los pescadores en pequeña escala;
  • Aplicar y hacer cumplir el derecho marítimo internacional.

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