Sobre cómo viven los jóvenes hoy el cambio climático

Siempre quise viajar por ciertas partes del mundo que apunto en una lista desde que era muy pequeña. De pronto me doy cuenta que lo que siempre quise es conocerlo, pero no «habitarlo«. Me enseñaron a habitar puertas adentro, en cierta forma, el mensaje ha sido «crea la casa de tus sueños«. Llegando a mis 40s entiendo que el parque, la montaña, aquellos árboles y el mar, que visito cada vez que puedo, son nuestros. Y no en un sentido de propiedad sino hablo con el afán de habitar el mundo.

Es un sentido de pertenencia y una relación de responsabilidad. Para los jóvenes de hoy es diferente, no hablan de «necesitar cambiar de hábitos«, no dicen querer «ayudar al mundo exterior«. Buscan su propio futuro. Este activismo se filtra en el trabajo, piden un compromiso social y medioambiental a las empresas, a las marcas y productos que consumen.

“Creo que es diferente para los jóvenes. Para nosotros la destrucción del planeta es algo personal”

En el HAZ 12 hablamos sobre cómo afecta el cambio climático en la salud mental, en general. Profundizamos aquí lo que le pasa a nuestra población más joven, para llegar a decir que el camino hacia la sostenibilidad se vuelve también fundamental en el mercado laboral de hoy.

¿Qué es lo que buscan?

¿Y qué sienten? Se llama ecoansiedad

La ecoansiedad está definida como angustia relacionada con las crisis climática y ecológica. Aunque dolorosa y angustiosa, la ansiedad climática es relacional y no implica un trastorno mental. Esta ansiedad es una emoción que nos alerta del peligro, lo que puede provocar que busquemos más información sobre la situación.

“La ansiedad climática no es una condición patológica, sino una respuesta adaptativa esperada a una amenaza real y enorme.”

Aún así, los jóvenes no buscan empatía ni enmarcarse en un caso de salud mental, sino que quieren que se escuchen sus opiniones, que haya igualdad y justicia en la política climática. 

Aunque no son sinónimos, lo encontrarás también como climate-anxiety (ansiedad por el clima), o climate burnout (síndrome de estar quemado por el cambio climático). Este último se da, sobre todo, en quienes trabajamos a diario en temas de medio ambiente.

Una investigación científica que deja en evidencia la dimensión del concepto

Según una investigación de Caroline Hickman et al. 2021, publicada en The Lancet Planetary Health (diciembre 2021), el 45% de jóvenes dijeron que sus sentimientos sobre el cambio climático influye de forma negativa su día a día.

Para este estudio han encuestado a 10.000 niños y jóvenes de entre 16 y 25 años de 10 países: Australia, Brasil, Finlandia, Francia, India, Nigeria, Filipinas, Portugal, Reino Unido y EEUU. Mil de cada país. Se han elegido estos países para representar una variedad cultural, de ingresos, vulnerabilidad climática y exposición a diferentes eventos del clima.

Algunos resultados en números y en sensaciones

Gráfico 1. Investigación de Caroline Hickman et al. 2021 — The Lancet Planetary Health.

• De los encuestados de todos los países el 59% estaba “muy” o “extremadamente” preocupado y el 84% estaba al menos «moderadamente” preocupado.
• Más del 45% de los jóvenes dijeron que sus sentimientos sobre el cambio climático afectan negativamente su vida y funcionamiento diario.
• El 75% dijo que cree que el futuro es aterrador y el 83% dijo que piensan que la gente ha fallado en cuidar el planeta.
• Los encuestados calificaron negativamente las respuestas gubernamentales al cambio climático y reportaron más sentimientos de traición que de tranquilidad.

La angustia parece ser mayor cuando los jóvenes creen que la respuesta del gobierno es inadecuada.

• En el Sur Global, los países que expresaron más preocupación y un mayor impacto en el funcionamiento tendieron a ser más pobres y más directamente afectados por el cambio climático.
• Mientras que en el Norte Global, Portugal, que tuvo aumentos dramáticos en los incendios forestales desde 2017, mostró el nivel más alto de preocupación.
• Más del 50% informó cada una de las siguientes emociones: tristeza, ansiedad, enojo, impotencia, impotencia y culpa.

Convertir la preocupación en acción

Los psicólogos en general coinciden que el gran problema es que cargan con un gran estrés y pocos recursos para mitigarlos o evitarlos. Proponen tres pasos importantes para acompañarles: escucharles, hablar con gente que comparta los mismos intereses (armar comunidad) y validar sus emociones. Y como paso fundamental, la calma que trae la acción: tomar decisiones en nuestro estilo de vida o ser parte de un grupo activista por el clima. Unirse a un grupo por regiones o ciudades que hagan actividades, campañas o ayudas por el clima. Sin duda ser parte de la solución deja una sensación de esperanza, nos hace creer que podemos marcar la diferencia.

¿Qué pretenden los jóvenes de las empresas donde trabajan?

Según un estudio hecho por Deloitte a la Generación Z y Millenials, en 2022, los encuentra preocupados por la sostenibilidad, la salud mental y el alto coste de vida. Reclaman un compromiso social en las empresas donde trabajan, y estos son un motivo para pensar, o no, en la movilidad laboral. Algunos datos son:

1. Solo el 15% de la Gen Z y el 14% de millennials están de acuerdo en que las empresas están tomando medidas de peso.
2. El 11% de la Gen Z y el 13% millennials piensan que sus gobiernos están muy comprometidos para abordar la emergencia climática.
3. Casi la mitad de los Gen Z (48%) y 43% de los millennials dicen que han presionado a sus jefes para que tomen medidas sobre la emergencia climática.
4. La Gen Z y los millennials quieren que sus jefes inviertan en acciones ambientales visibles y cotidianas. Acciones que tengan la oportunidad de participar ellos directamente.